Grecia-República Checa (1-2)
Pájara griega en los primeros 5 minutos y partido sentenciado. Eso sería el resumen a simple vista de este partido, si no fuera porque Cech, realizó un mal blocaje y dejó el balón muerto, para que Gekas a principio de segunda parte diera emoción al partido. El entrenador griego, no se puede permitir que Gekas, su goleador más contrastado y experimentado se quede de inicio en el banquillo, y en el partido decisivo, en el once inicial, le sustituya un chavalín de 20 años aún muy verde y por pulir, Fortounis, que no es delantero si quiera. Aunque esto adelantó la posición de Samaras y Salpingidis.
Faltó calidad y colgar menos balones, pero de Grecia no se esperaba mucho más. Por último, un 10 para Karagounis, con el brazelete de capitán, demostró que es el mejor jugador heleno y el líder de este equipo, lo dio todo hasta la extenuación.
En República Checa, hablemos de Rosicky. Sólo jugó la primera parte, pero demostró que a buen nivel, su equipo puede ser muy competitivo. A la contra, en la segunda parte pudieron sentenciar pero no lo hicieron y lo podrían haber pagado, aunque la inocencia griega no fue suficiente. Pilar 2 goles en dos partidos.
En la última jornada ambos equipos dependen de sí mismos, a los Checos si Grecia no gana incluso le valdría el empate. Aunque deben tener cuidado porque los anfitriones polacos parece que van en línea ascendente.
Grecia deberá tirar más que nunca de épica y derrotar a Rusia, toda una hazaña.
Polonia-Rusia (1-1)
Partido con bastante ritmo, lleno de deroche físico y jugadas de área a área. A veces era un correcalles, que sin duda nos hizo disfrutar. Tras el gol de Dzagoev, en el 37', que se coloca pichichi en solitario con 3 goles, el partido se fue al descanso y parecía que el dominio ruso se acentuaría en la segunda mitad.
En la segunda parte, Polonia se volcó con lo que pudo, creo ocasiones y dejó espacios, que los rusos aprovechaban con contras rapidísimas. En una de ellas llegaría la jugada clave del encuentro. El fallo en el último pase en un contragolpe perfecto ruso, llevo a Polonia a realizar otro de la misma índole que terminó con un golazo de Blaszczykowski que con la zurda, su pierna mala, enganchó un cañonazo a la escuadra desde el borde del área. Golazo merecido para los Polacos que no pararon hasta conseguirlo. El riesgo a veces te da buenos frutos.
Tras alguna que otra jugada peligrosa en ambas porterías, tuvimos unos últimos minutos dónde ambos equipos se conformaron con el empate y dejarlo todo en el aire para la última jornada. Ambos conjuntos también dependerán de ellos mismos para su pase, al igual que Griegos y Checos, última jornada emocionante en este grupo. Ninguno está eliminado aún, las maletas aún tienen que esperar.
Pájara griega en los primeros 5 minutos y partido sentenciado. Eso sería el resumen a simple vista de este partido, si no fuera porque Cech, realizó un mal blocaje y dejó el balón muerto, para que Gekas a principio de segunda parte diera emoción al partido. El entrenador griego, no se puede permitir que Gekas, su goleador más contrastado y experimentado se quede de inicio en el banquillo, y en el partido decisivo, en el once inicial, le sustituya un chavalín de 20 años aún muy verde y por pulir, Fortounis, que no es delantero si quiera. Aunque esto adelantó la posición de Samaras y Salpingidis.
Faltó calidad y colgar menos balones, pero de Grecia no se esperaba mucho más. Por último, un 10 para Karagounis, con el brazelete de capitán, demostró que es el mejor jugador heleno y el líder de este equipo, lo dio todo hasta la extenuación.
En República Checa, hablemos de Rosicky. Sólo jugó la primera parte, pero demostró que a buen nivel, su equipo puede ser muy competitivo. A la contra, en la segunda parte pudieron sentenciar pero no lo hicieron y lo podrían haber pagado, aunque la inocencia griega no fue suficiente. Pilar 2 goles en dos partidos.
En la última jornada ambos equipos dependen de sí mismos, a los Checos si Grecia no gana incluso le valdría el empate. Aunque deben tener cuidado porque los anfitriones polacos parece que van en línea ascendente.
Grecia deberá tirar más que nunca de épica y derrotar a Rusia, toda una hazaña.
Polonia-Rusia (1-1)
Partido con bastante ritmo, lleno de deroche físico y jugadas de área a área. A veces era un correcalles, que sin duda nos hizo disfrutar. Tras el gol de Dzagoev, en el 37', que se coloca pichichi en solitario con 3 goles, el partido se fue al descanso y parecía que el dominio ruso se acentuaría en la segunda mitad.
En la segunda parte, Polonia se volcó con lo que pudo, creo ocasiones y dejó espacios, que los rusos aprovechaban con contras rapidísimas. En una de ellas llegaría la jugada clave del encuentro. El fallo en el último pase en un contragolpe perfecto ruso, llevo a Polonia a realizar otro de la misma índole que terminó con un golazo de Blaszczykowski que con la zurda, su pierna mala, enganchó un cañonazo a la escuadra desde el borde del área. Golazo merecido para los Polacos que no pararon hasta conseguirlo. El riesgo a veces te da buenos frutos.
Tras alguna que otra jugada peligrosa en ambas porterías, tuvimos unos últimos minutos dónde ambos equipos se conformaron con el empate y dejarlo todo en el aire para la última jornada. Ambos conjuntos también dependerán de ellos mismos para su pase, al igual que Griegos y Checos, última jornada emocionante en este grupo. Ninguno está eliminado aún, las maletas aún tienen que esperar.
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